Hace un año atrás la espera era más eterna que ninguna, era el día tan esperado en años.. fue la noche perfecta: compartí el amor hacia vos con miles y miles, grité, lloré, salté, canté, reí, y fui MÁS FELÍZ QUE NUNCA. La espera hasta el 19, que la lluvia frustró todo.. la espera hasta ese 20 de diciembre. El tan ansiado momento en el que apareciste, tan hermoso y randiante, y no podía contener tanto emoción, que expresé en gritos, llantos y sonrisas. Te veía ahí en vivo y en directo, por primera vez después de años.. te escuchaba y te sentía más cerca que nunca, tan sólo metros me separaban de esa estrella que tanta luz irradia, y que en ese momento me hacía brillar. Fueron las horas perfectas, canté cada canción y las viví como siempre, pero de una forma mucho más particular y hermosa.. estabamos ahí, juntos, cantando y viviendo lo mismo a la vez. LA euforia, la alegría, la emoción, la tristeza de que termine, pero el sentimiento de haber vivido esa noche, INBORRABLE noche.. Volver con una sonrisa inborrable y ver los videos una y otra vez.. había sido más felíz que nunca a los 16 años, había tocado el cielo con las manos. (lo que no sabía es que esa misma madrugada mi vida iba a dar un giro de 360° y por primera vez mi salud fue lo más importante, y conocí el dolor como pocos) Pero aún así, HOY quiero recordar eso, y sentir que me seguís haciendo felíz como desde años atrás cuando elegí seguirte. Estés donde estés, Gustavo, me hacés bien. GRACIAS TOTALES por todo lo que me hacés sentir con tu música y con tu persona. Sos único.
Anto P.
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